“Federica tiene 68 años y acude a Urgencias porque se encuentra muy dolorida
de su rodilla derecha.
El médico que la ve, le comenta tras hacerle una radiografía que se trata de una
artrosis de evolución que se encuentra en una etapa artrítica, pero que no se trata de una
urgencia hospitalaria y que por qué se ha acercado a atención especializada y no a su
Médico de atención Primaria”.
“Federica le comenta:
- He estado los últimos meses encargada de mi marido con Alzheimer que ha fallecido
hace 20 días, y en el centro de Salud, aunque me queda cerca, está a una distancia que
no podía recorrer y, cuando lo hacía, tenía que ir muy temprano para pedir el número y
que la doctora que me veía me trataba muy mal y apenas me revisaba, siempre
mandando AINES y reposo”
- Sólo una vez me mandó al traumatólogo – prosiguió- éste al rehabilitador y terminé
en el fisioterapeuta, que me alivió durante las sesiones y he estado unos meses mejor.
La verdad que no seguí haciendo los ejercicios ni siguiendo sus indicaciones… pero es
que no he tenido tiempo… de la mitad ya ni me acuerdo…. Yo creo que si me hiciera
una resonancia….”
La Especialista le insta a regresar a su médico de cabecera, le prescribe
analgésico tras comprobar en su historial su hipertensión y se despide de ella con un “lo
siento, Federica, debía y debe hacer caso a los profesionales que le tratan…”.
Pinche aquí para acceder al análisis del caso.
Os dejo también una breve reflexión acerca de lo que debería hacer Federica para la cura de su patología: (pinche sobre la imagen)